PERIODONTITIS AVANZADA
En los casos de periodontitis avanzada, los tejidos se encuentran tan dañados que es difícil que respondan favorablemente a técnicas convencionales o menos invasivas. Para determinar el tratamiento a pautar, es necesaria una exhaustiva valoración del estado de las encías por parte del odontólogo, periodontograma y un estudio radiográfico por ortopantomografía para determinar la cantidad de hueso de soporte que está dañado en la zona donde cursa la sintomatología, pero también ver el resto de la dentición y anticiparse a posibles nuevos focos de periodontitis.
La periodontitis avanzada, sin embargo, sí suele responder favorablemente a intervenciones de limpieza y remodelaje de encías bajo anestesia local, injerto de tejido blando gingival y también de injerto óseo. Evidentemente, el tratamiento complementario farmacológico es importante. Fundamentalmente, se centra en antibióticos, bien por vía oral o bien inyectados a nivel local sobre las bolsas periodontales a combatir.
Para que la periodontitis avanzada se corrija en la medida de lo posible (a veces solo puede evitarse la pérdida de la pieza dental, ya que la encía está demasiado afectada), y no sufra de recidivas, es necesaria una correcta higiene bucodental por parte del paciente (cepillado, uso de seda dental y de cepillo interproximal, junto con colutorios), por lo que el odontólogo deberá explicar detenidamente al paciente cómo realizar sus cuidados bucodentales por si estuviera realizándolos de forma incorrecta o insuficiente.
Actualmente existen tratamientos coadyuvantes, como el uso de probióticos para favorecer la salud gingival, que aunque no solucionan la patología, sí que pueden ayudar en el tratamiento de algunos pacientes.